Para la mayoría de los cuidadores, la hora del baño es una lucha para las personas mayores, e incluso una gran lucha si sus seres queridos tienen otras afecciones. Naturalmente, a medida que las personas envejecen, comienzan a no gustarles las duchas o se muestran reacias a bañarse.
Se convierte en algo que ya no esperan. Pero las implicaciones para la salud de no ducharse son demasiado costosas. Pueden desarrollar infecciones y afecciones de la piel que pueden ser demasiado complicadas de tratar, por lo que, por muy difícil que sea, hay que hacer que se bañen.
Razones por las que las personas mayores se niegan a bañarse
Pueden tener miedo del sonido del agua corriendo o de ver el agua correr por sus cuerpos. También pueden tener alucinaciones de que se ahogan o son succionados por el orificio de drenaje de agua. Todo esto les hace temer por completo el baño y el baño.
La mayoría de las personas mayores experimentan dolor al agacharse y pararse y, por lo tanto, la ducha es muy tediosa, desafiante y agotadora.
Suelen asociar el baño con el dolor. Tener un baño accesible para discapacitados y ayudas para la ducha es la solución a sus desafíos de movilidad.
Algunos encuentran incómodo el agua fría o tibia, mientras que otros temen sufrir accidentes en el baño, como resbalones y caídas.
La pérdida de memoria es otra razón por la que las personas mayores pueden negarse a bañarse.
O se olvidan por completo de tomar un baño o no pueden recordar cuándo lo hicieron por última vez para poder planear otro. Si les preguntas, responderán sinceramente que se han bañado recientemente o que se han bañado recientemente.
Consejos para convencer a una persona mayor de que se bañe
Los siguientes consejos te ayudarán a convencer a tus padres ancianos de que se duchen y te facilitarán el cuidado.
Comunicar
Hablar con ellos al respecto le ayudará a comprender por qué se niegan a bañarse. Es importante conocer primero la razón antes de convencerlos.
Hábleles sobre la ducha de una manera suave y positiva. Evite regañar y sea cortés. Hágales entender por qué es importante que se duchen y qué sucedería si no lo hicieran.
Intente pintar una imagen muy vívida de los dos escenarios, esto les hará comprender completamente la necesidad de bañarse.
Consultar al doctor
El médico principal puede ser de gran ayuda para convencer a su ser querido de que se duche.
Dado que el médico comprende a la persona mayor, puede determinar el motivo del comportamiento y orientarlo sobre cómo convencer a sus padres de que se bañen.
También es más probable que el padre anciano se tome más en serio los consejos del médico.
Utilice el equipo y los productos de ducha adecuados
Haga que el baño sea divertido y cómodo invirtiendo en equipos como sillas elevadoras de baño, cabezales de ducha de mano y sillas de ducha.
La mayoría de las personas mayores encuentran que bañarse es una tarea agotadora, especialmente debido a sus problemas de espalda y rodillas que dificultan el agacharse y pararse.
Este tipo de equipos los hará sentir más seguros, más cómodos y, como resultado, estarán más dispuestos a bañarse. Además, comprar productos que les encanten, como gel de baño perfumado, hará que el baño sea agradable.
Obtenga atención en el hogar
Un cuidador profesional está bien capacitado sobre cómo manejar a los ancianos y sobre las formas de mantenerlos limpios.
Las personas mayores con demencia necesitan cuidados especiales y mucha atención. Un cuidador profesional puede manejar adecuadamente a un anciano con demencia y asegurarse de que se duche con regularidad.
Las personas mayores también son más compatibles con los profesionales médicos y, por lo tanto, se llevarán bien con un cuidador profesional.
Trae amigos y familiares
Invitar a amigos y familiares o pedirles que salgan con un adulto mayor lo alentará a meterse en la ducha y limpiarse.
Los padres mayores suelen estar emocionados y ansiosos por salir y reunirse con amigos y, por lo tanto, se bañarán rápidamente cada vez que invite a amigos a pasar tiempo con él / ella.
Sea paciente y respete la privacidad de las personas mayores
Ser cuidador requiere paciencia. A la mayoría de las personas mayores les gusta hacer las cosas a su ritmo y a su tiempo.
Cuando convenza a su padre mayor de que se duche, es importante que le permita hacerlo en su propio momento.
Evite apresurarlos a hacer cosas y ofrézcales opciones en lugar de instrucciones. Por ejemplo, pregúnteles si se ducharán antes o después de almorzar. Además, respete la privacidad de sus padres ancianos y haga que se sientan cómodos.
Permítales que se duchen mientras están vestidos si se sienten cómodos y cúbralos con una bata cuando los ayuden a ducharse. No ayude a la persona mayor a bañarse si se siente incómoda con él.
Tener una rutina
Crea una rutina y cíñete a ella, esto acabará con las luchas de baño a largo plazo. Por ejemplo, si una persona mayor prefiere bañarse por la mañana o antes de acostarse, asegúrese de que se duche a esa hora exacta todos los días.
De esa manera, estarán conectados para prepararse automáticamente para un baño cuando sea el momento. La rutina es importante especialmente para aquellos con demencia. Honrar la rutina no solo es útil para los ancianos sino también para el cuidador.
Caliente el baño para mayor comodidad.
Si su ser querido teme bañarse porque no quiere sentir frío, entonces la única forma de convencerlo de que se bañe es hacer que el baño esté lo suficientemente caliente.
Encienda el calentador para calentarlo al menos 10 minutos antes de que entren al baño. Además, cúbralos con una toalla gruesa o incluso dos inmediatamente después del baño para que no sientan frío.
Ten todo listo antes del baño
Antes de pedirles que se bañen, comience por reunir todo lo que necesita para las toallas de baño, el champú para la ducha, las toallitas y las esponjas.
Cuando te ven preparándote para su baño, también comienzan a prepararse mentalmente para un baño. Además, tener todo listo hará que el proceso de baño sea más rápido y eficiente.
Conseguir que las personas mayores se bañen puede ser tedioso, pero la higiene es fundamental para las personas mayores.
Por lo tanto, es importante comprender primero por qué se niegan a bañarse. A partir de ahí, aborde sus preocupaciones hablando con ellos cortésmente para hacerles entender por qué es saludable para ellos bañarse con regularidad.